lunes, 27 de abril de 2009

Fue por lana y resulto trasquilado


Las ironías de la vida.

Resulta que en Rusia se hacen justicia con su propia mano y con la ajena. Un hombre de nombre Viktor de 32 años, entro a una estética con pistola en mano (dice la estilista Olga que esa fue la principal razón por la cual lo mantuvo) a intentar asaltar el negocio.

Mientras el asalto trascurría con “cierta normalidad”, Olga una estilista de 28 años, so ofreció a entregarle el dinero al asaltante, pero como trabajadora de Sullivan que se le va el cliente sin pagar, lo mando al suelo con una llave que ya la quisiera el propio Místico.

Después de tenerlo sometido a sus pies, Olga llevo al asaltante a la parte trasera y lo mantuvo ahí, cual heroína informo a los presentes del negocio que ya había llamado a la policía y se habían llevado al ladrón.

En las próximas 48 horas la joven abuso sexualmente del asaltante, Viktor narra, que recibió una pastillita azul para aguantar la embestida de Olga, quien lo había amenazado con entregarlo a las autoridades si este no sucumbía ante sus bajos instintos.

Después de saciar sus instintos Olga libero a sus prisionero, quien al verse liberado acudió al hospital mas cercano para ser atendido por lesiones en sus partes ya no tan intimas, y una vez que pudo caminar erguido, acudió a la policía para demandar a su agresora por abuso sexual.

La joven al enterarse de la demanda dijo: "Qué idiota. Sí, lo hicimos algunas veces, pero le compré un nuevo par de pantalones, lo alimenté, le di de beber y hasta algo de dinero cuando lo liberé".

Debido a que los dos están demandados el uno por el otro, es posible que terminen los dos en la cárcel pero que compartieran la misma celda, esa fue la petición de la celda.

Así que por el trato no se pudo quejar, lo alimentaron, lo desvistieron y lo vistieron y hasta le dieron lana, por sus servicios. Si así tratan a los asaltantes en el las lejanas tierras del hielo, apártenme el próximo boleto de avión que voy dispuesto a asaltar, claro con mi propia pistola en las manos.

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